El ministro de Justicia: la copia privada "está por perfilar"

El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, ha afirmado respecto a la sentencia que considera que descargar música en Internet no es delito si no hay ánimo de lucro, que el régimen jurídico de la copia privada "está aún por perfilar" y destacó que la propiedad intelectual es un bien precioso que debe protegerse.

López Aguilar se refirió a la sentencia dictada por una juez de Santander que ha absuelto a un internauta, para el que se pedían dos años de cárcel, de un delito por descargar y compartir música en Internet.

El titular de Justicia señaló que se ha actualizado la normativa sobre este asunto en el orden penal para lanzar el mensaje de que "ciertos atentados deben ser tomados muy en serio, desde luego aquellos que tienen afán de lucro y hemos excluido la copia privada, cuyo régimen jurídico está por perfilar".

"Estamos intentado afinar y al mismo tiempo proporcionar los instrumentos sensibles para que cada juez pueda encontrar la respuesta adecuada a cada caso singularizado", recalcó el ministro, quien explicó que en este supuesto "habrá sus recursos" y por lo tanto se tendrá que esperar a una sentencia firme.

Indicó que esta sentencia, que no quiso comentar, "podrá ser discutida" y apostó por los valores constitucionales de la propiedad intelectual "que son muy serios". Durante la inauguración de las jornadas, explicó también que no todo quebrantamiento legal es penalmente relevante y que por ello se puede distinguir entre un

Por su parte, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, declinó también valorar políticamente la sentencia que, dijo, están obligados a respetar y a acatar.

Defendió la necesidad de luchar contra la falta de sensibilización y recordó que mientras nadie reconoce abiertamente defraudar a Hacienda, algunos se jactan públicamente de conductas lesivas contra el derecho de la propiedad intelectual.

En la inauguración de las jornadas intervino también el presidente de Promusicae, entidad que aglutina a la mayor parte de las discográficas españolas, Antonio Guisasola, quien calificó la sentencia de "disparate".